LO LLAMAN DEMOCRACIA Y NO LO ES

 Ayer resultaba emocionante el oír el cántico deportivo en la plaza del Pilar de Zaragoza adaptado al sentimiento de frustración que existe por la Democracia actual,... ¡lo llaman democracia y no lo es !,... ¡lo llaman democracia y no lo es,... oeh,... oeh,... oeh !...
Realmente te ponía los pelos de punta,... era un poco el decir entre todos, y con ganas, todo lo que llevan guardado en su mundo de opinión y en los ambientes de trabajo.
Ayer gente de toda España salió a la calle, gente comprometida con la razón, la convivencia y los buenos fundamentos, gente que le quiere dar a la Democracia su dimensión real y que creen, que en cierta manera, la están deteriorando los abusos del capital, la búsqueda incontrolada de la riqueza y el no tener clara la idea de cómo se tiene que gobernar un país, obviando lo más importante de todo que es la felicidad de sus gentes.

Existe mucho cansancio, vemos como las agencias de opinión de capitales, marcan la economía de un país y la azuzan creando mucho inseguridad en sus dirigentes económicos y se convierten, de hecho, en sus dueños. Los políticos quedan en segundo plano y la economía financiera marca, por interés, los países de acoso y derribo.

Se  aceptan a los inmigrantes en tiempos de bonanza por demanda de mano de obra, pero cuando no hay bonanza sobran y eso no está bien..

En España no acertamos con las recetas. Tenemos que mantener mucha burocracia, muchos virreinatos, muchos parlamentos regionales. No somos buenos administradores, ni hemos sabido interpretar las necesidades en tiempos de bonanza; hemos gastado en obras sin ningún control de necesidad y por ende, en la Comunidad Europea nos dicen que somos poco aplicados.

La justicia es lenta y poco ejemplar ante los casos de corrupción y se desconfía de ella.
Los políticos, a veces, no son ejemplo de seriedad, no sienten el país como una vocación de servicio y lo emplean como medio de vida para su futuro particular.

El político, desgraciadamente, no piensa que lo primero es dar un medio de vida a la gente y dejarse de gastos excesivos en la administración. Con estas conductas nos estamos pareciendo a los países que tienen muchos palacios rimbombantes y el pueblo tomando el sol sin trabajar.

Nos queda un colectivo maravilloso,... los jóvenes, acuciados por el paro; la llaman la generación perdida, sin visos de futuro, pero tenemos también trabajadores que se hacen eternos en las empresas y que bien, con una buena gestión, podrían ceder el puesto a los jóvenes para volverlos a ilusionar.

Los jóvenes, hoy día, son inteligentes, tienen mucha formación, los llaman también, los jóvenes voladores, los erasmus, con inquietudes de futuro y no se merecen este abandono.

Por esto existe el desencanto porque la Democracia no cumple su cometido de igualdad y racionalidad y se vuelve una quimera.

La Democracia se construyó para calibrar el nivel de obligaciones y derechos y así poder crear una sociedad mejor.

Chavierín ve que hay mucha gente que merece la pena, ¡¡¡ ENHORABUENA !!!.