Y desde el sentón del parque desgranaba la felicidad, la mantenía entre sus manos,... buscaba causa y asideros para comprender de nuevo ese espíritu de los grupos de las plazas; recordaba que, entusiasmado, oía al orador y atrapaba retazos de esperanza para llenar de nuevo esa cesta de la dignidad; la profundidad de la reflexión, la emoción, el deseo de construir un país mejor le entusiasmaban y sembraba en él una delicada paz,... eso anhelaba.
Y entre la placidez del nenúfar de agua y sosiego, este escribidor, ve e intuye que ese espíritu del 15 M, vive y se mantiene, a pesar de las tardanzas, entre las personas de bien; las reflexiones no han perdido su esplendor y conservan los mismos principios de justicia social, es como estar emocionalmente en esos lugares, ensimismado, escuchando al orador y dejándote llevar por las afirmaciones doctas que ensalzan la dignidad de la persona y expresan la necesidad de cambiar las cosas.
Esa es la fuerza de la palabra, entre cestillos llenos de poemas de Ghandi y estampas de natura y universo y, entre canciones de Cold Play, reuniones emotivas que reconfortan el ánima rodeado de personas con una sensibilidad especial,.... ese es el tesoro escondido, la felicidad que se palpa en el ambiente.
Y ese tesoro escondido, lleno de inteligencia, es el que, en cierta manera, está cambiando la forma de hacer las cosas; los políticos de la vieja escuela se ven observados y se centran más a la hora de tomar decisiones; los jueces valientes captan el mensaje y van cercando a esos " profesionales " dejados de la mano de Dios y aparecen visos de esperanza entre la población porque ven salir el sol.
Nos ha tocado vivir tiempos de urgencias, de desasosiegos, pero atisbo que llegan tiempos apasionantes,... de sabiduría,... espero que nos dejen.
Tiempos de emociones
Chavierín
Muchas cosas que este escribidor predijo, se están cumpliendo.
ResponderEliminarAsí se hace país. Chavierín.