"Cuando la tierra te ofrece lo que tiene "
Quizá para reverenciar a la piedra arenisca todo empezó en Uncastillo con la construcción de una pila de agua para que bebieran las gallinas,... ¡ No lo sé !,... tampoco me extrañaría. No hay corralera que no tenga una pila, presta y soberbia, al lado del fajo de lechacinos para dar de comer a los conejos.
.... en los principios....
El aguante del agua en remanso de la piedra, era de tal calibre que la emplearon por su magnanimidad a la entrada de los templos para hacer la pila bautismal y las pozas de la persignación. Descubrieron que el paso del tiempo y los aguaceros no hacían mella en ella y la emplearon para que fuera testigo de los tiempos utilizándola para reforzar los ventisqueros.
Algún venturoso paisano ducho en el manejo de la artesanía con mazo y puntero, vería su ductilidad y empezaría a esculpir sargantanas y pajaros en los aleros de culto porque la sabiduría de Dios era infinita y requería ceremonial,... toda alabanza era poca en esos tiempos de agravio a la cristiandad,... se veía venir....
.... también la emplearon para otra digna labor....
El curso del buen cantero comenzó en los ríos, haciendo pasaderas para salvar las alturas de las aguas en los inviernos y en las épocas de los hielos, midiendo bien el salto y no caer en los miedos,... ¡ Qué sean planicas y que sienten bien, Valentín !...
La abundancia de pedregal inundaba el territorio de tal manera, que era de buen criterio, emplearlo para hacer paredes y cabañas en los montes,... Y como se convirtió en piedra oficial por su servicio, la eligieron para construir las haciendas alrededor de esa inmensa mole.
Y allí en medio de esos ríos nació la artesanía de la piedra arenisca para edificar el castillo e iglesias sin conocimiento, con callejuelas, pasadizos y casas señoriales haciendo juego. Y se aprendieron de carretilla los fundamentos del Arte Románico y el Gótico para darle vida a las piedras; tanta vida le quisieron dar, que no dejaron rincón sin su impronta artesana,... vayas por donde vayas...
.... humilde reflexión....
Creo que por la abundancia de piedra arenisca que hay en el lugar, fue por lo que se decidieron a construir semejante conjunto artístico, con grandes apuestas arquitectónicas rizando el rizo a la dificultad y a las alturas.
El misterio queda, no obstante, en el aire con otra pregunta,... ¿ Porqué decidieron construir en Uncastillo semejante cantidad de iglesias y ermitas con cientos de motivos artesanos ?,... ¿ Por la ubicación natural como cruce de caminos ?,... ¿ Por la religiosidad ?,... puede ser, pero ese empeño por adornar la piedra, no se da en otros lugares.
El ingenio de los antiguos canteros lo estamos viendo estos días con los cientos de obras de arte y esculturas que se exponen en las redes sociales sobre Uncastillo,... impresionan.
Las agencias de calificación testan los pueblos, y les dan un grado de belleza que más o menos coincide con la realidad. A Uncastillo, algunas veces lo nombran, otras no; eso se concibe como normalidad, pero esta gran cantidad de arte tiene otro significado, está en otra dimensión, expuesto para el mundo de la interpretación y la observancia,... ¡Voy de propio a ver con tranquilidad el ingenio gravado en sus paredes !,... estudiosos....
Tendremos que aprender a mostrar semejante legado y darle la importancia que realmente se merece.
Valorar lo que tenemos en casa.
Cuando se enfrió la corteza terrestre, apareció en ese lugar, como regalo, la piedra arenisca, la convidada que protegió a muchas generaciones.
Bendita piedra y benditos canteros.
Chavierín.
Que duda cabe que el entorno condiciona los afanes humanos. En Uncastillo abundaba (y abunda) el buen material. Yacimientos pétreos a disposición de los muchos artistas que -seguramente- vio nacer nuestro pueblo.
ResponderEliminarEl resultado ha sido formidable y allí ha quedado para la posteridad. Tallas preciosas que guardan con celo el misterio del significado de sus graciosas expresiones.
En esta ocasión ha hilado usted bien fino, D. Javier y ha tirado con maestría de ingenio y de imaginación.
Presenta una lógica de desarrollo de acontecimientos que seguro que se ajustaría a lo que ocurrió en realidad. Y por encima de todo el asombro y la reverencia por la noble arenisca.
Todas las figuras de las gárgolas, las cariátides, los canecillos decorados y las cornisas, los pórticos y las arquivoltas nos han acompañado desde la infancia. No es de extrañar que en algunas agitadas noches de verano algunas de ellas retornen a nuestra mente en forma de crípticos sueños...
¡Excelente artículo! Muy personal, y sumamente original. Como siempre.
Un abrazo
JL
Genial Javier, cuando hablas de Uncastillo sale el mejor escribidor que llevas dentro. Estoy viendo las piedras, las tallas...y los bebederos, y las torres...Desde Leganés un abrazo.
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