"Pido ayuda a Camille Monet y su tranquilidad, para augurar futuras esperanzas ".
Después de tres meses de disciplina a causa del virus, seguimos con el aturdimiento, queremos ver la luz al final del túnel pero no aparece,... ¡ ni mención hace ¡. Por su culpa vivimos en las dehesas de la intranquilidad,... nadie puede con él.
Ante esta situación, bueno es el templar los ánimos para actuar con cierta sensatez.
.... ¡Déjame un sitico, Gregorio, que vamos a ver lo que dice este mozé!
Todo está encorsetado de nuevo por la incertidumbre, por la aparición de ciertos focos de infección que alarman al ciudadano.
En estas circunstancias, bueno es, el permanecer en la vigilancia y en el cuidado a la exposición, así cumpliremos con las recomendaciones del doctor Simón. Esto es lo que nos toca vivir y lo tenemos que aceptar para no caer en la permanente frustración.
Hablando con los jóvenes, que quieren hacer planes para encauzar su futuro, les comento que ahora no son tiempos de preocuparse por nada,... que estén tranquilos hasta, " cuando los eneros nos digan algo ", nadie tiene la culpa de esta contingencia, y cuando lleguemos al enero de la frontera, veremos si nos ha tocado la pedrea de la vacunación,... pero ahora, relajación. El agobio emocional no está permitido en estos momentos.
Sé que a mucha gente le acecha el desánimo por la incertidumbre laboral y económica, pero aún con todo, tenemos que tener la esperanza de que los gobernantes organicen todo en condiciones ,... veo unas ganas y un compromiso fuerte en los jóvenes dirigentes al que no estábamos acostumbrados.
Cuando has llegado al mundo de la jubilación dejas de darle valor a las cosas, a tu poderío terrenal, a la labor realizada a lo largo de tu vida,... Ahora te encuentras en un estado emocional en el que no le das importancia a nada, y lo único que buscas, es placidez y un poco de salud para ir tirando. Con esto quiero decir que la vida nos da unos toques de realidad,... que querer alcanzar el cielo tiene un recorrido personal que al final no dice nada, dedicamos mucho tiempo para ese cometido,... ¿ y tanto para qué ?,... la urgencia nos la marcamos nosotros, y en este momento especial las prisas no tienen nada que contar,... no hay que darse mal por nada.
Mucho tiempo te da la vida,... para disfrutar,... para caer,... para volverte a levantar, y sobretodo, para entender la condición humana.
Odio la tristeza y el desánimo,... saldremos adelante.
¿ Te ha gustado el escrito, Gregorio ?,... sí, sí mozé.
Chavierín.
Buena inspiración te ha proporcionado Monet. Hablas desde el atril de la experiencia; desde la sapiencia que proporcionan los años... Y lo que afirmas no puede ser más cierto: la vida te da mucho tiempo para entender la condición humana, entre otra muchas cosas...
ResponderEliminarYo creo que a Gregorio le ha gustado el escrito y le han impactado tus reflexiones. La tristeza y el desánimo a ningún lugar nos llevan. Coincido contigo que cada día de vida -y más a estas edades- es una invitación a disfrutar con calma de lo cotidiano.
Buenos consejos. Escritos quedan.
¡Un abrazo, D. Javier!