FRANCISCO ALCUBIERRE, " POLICA "

      " RECORDAR  ES  VOLVER  A  VIVIR ". 

    

     En meritorio libro, no tengo más que agradecer un relato de vida lleno de sentimiento. 

    La fuente del manantial de esa escritura, sale del corazón de un uncastillero, una buena persona que quiso contar, para que queden por escrito, todos los detalles que rodearon su vida y la de su reverenciado pueblo. Un trabajo a conciencia de memoria y esfuerzo que tuvo a bien emplear la plegadera, porque sino, no habría manera de juntar semejante cantidad de nombres, oficios y costumbres que existían en el pueblo.

    Sí, Paco, este escribidor que te estima desde los tiempos que te conoció en el bar Tauro de tu sobrino Guillermo, de cerca de los toros, puede corroborar el gran amor que le tenías a tu pueblo a pesar de que te obligó a ir con la maleta a la plaza del Ordinario para empezar un nueva vida en la gran ciudad. No eras el único aventurero, todos tuvimos que jambrar, porque en ese querido pueblo no había pan para todos.

     El relato de tu mundo del pastoreo, con las costumbres diarias, resulta entrañable. Conociendo tu forma de ser, estoy seguro de que serías un joven feliz,... y disfrutarías de esa vida en el corral y en esos montes de Dios, que aunque eran unos secarrales, tenían esa belleza que siempre se queda en el corazón,... ¡ Paco !,... somos hijos del tomillo y el romero.

     La imagen ordeñando a las cabras en el serenau es bendita, es una de las imágenes de nuestra vida,... y la reflexión de, " cuando yo nací en Uncastillo había mucha gente, pero muy poca vida ", grandiosa, digna de un pensador de universidad aunque a los diez años dejaras de ir a la escuela. La vida te hizo grande.

    Dejas entrever en tu libro, ese aliento de conformidad de la gente de tu pueblo en los tiempos de la posguerra, de " cuando el tractor entraba y te quitaba el campico sin decirte nada ",... " el pueblo era de cuatro ",... y " de allí vino todo ",... siempre llevamos los uncastilleros esa tristeza encubierta.

     Mi hermana Herminia, me envió una anotación al móvil de tu libro, y me dijo, míralo que te gustará, es de un libro que escribió Polica,... y así fue, fue todo una sorpresa. Todos necesitamos volver a los instantes en los que fuimos felices.

     

     Enhorabuena por ese bello libro, Paco, te mereces todos los aprecios por tu forma de ser, de interpretar la vida y plasmarla en los escritos.

     Con respeto...

     Javier Cay,... hijo de Tomás,... y también de Uncastillo.