lunes, 12 de agosto de 2024

PAPILLON

           Está claro que en la etapa de la juventud no se valora la belleza con la misma intensidad que cuando eres mayor. Vuelves a ese lugar después de los años, y descubres en cada rincón, la grandiosidad del paisaje.
    
      .... ¿ y cuál era ese lugar ?

     Esta vez la expedición familiar partíó hacia las cumbres del Pirineo del valle de Tena y Formigal. La base para organizar las acometidas estaba en medio de la floresta del pantano de Bubal, en una urbanización de casetas y fresca de noche, que bien podía ser un campamento del general Custer.

     Este escribidor que retorna a ese lugar después de los años, sí que captó la belleza escondida en la frondosidad de su vegetación y en las cumbres extremas de sus alrededores. La peregrinación constante de ciudadanos venidos de todas partes del mundo dan fe de la atracción que ejerce el valle.

     La misión de "campamento " que mi hijo organizó, fue variada y enriquecedora. Contando con el grumete de abordo, mi nieto Mateo, realizamos las misiones encomendadas,... la de atravesar el pantano de Bubal en unos kayaks modernos,... la de subir a las cumbres de Formigal con el grumete al hombro,... la de tomar la caravana en un tren hasta las cumbres porque mi nieto está enamorado de las vacas y las quería contemplar. Visitamos el Parque Faunístico Lacuniacha, porque ver a mi nieto emocionado, contemplando a los animales, merecía todos los esfuerzos.

     Los pueblos de renombre del valle, Sallent, Panticosa, muy bellos, están dedicados expresamente al turismo, a la nieve de invierno, aunque en verano las ganas de caminar y de hacer rutas crea un ambiente montañero de primer orden,... descubres el nerviosismo de la gente con la mochila al hombro al amanecer el día.

     En los pueblos pequeños, como Piedrafita, también descubrí, el "Espíritu de la Colmena, pajares,... aventadoras y trilladoras de trigo expuestos en los parques, que recuerdan los principios de sus habitantes,... queda esa impronta en el corazón.

     Y en las aguas del rio Gallego para celebrar estos encuentros.

    .... la anécdota de " papillon " .... para acabar el relato.

    Una mariposa, como la de la fotografía, se posó en el dorso de mi mano, haciéndonos compañía en el restaurante de al lado del rio,... no nos quería abandonar,... tomaba el vuelo y volvió una y otra vez a posarse en la mano,... algo nos quería decir,... el duende de la montaña hizo las delicias de mi nieto.

    Una bella expedición en medio del espíritu de las Olimpiadas y la familia.

    Y así pasamos la vida.

    Chavierín.    

2 comentarios:

  1. Ya veo, ya veo que te lo has pasado de maravilla en compañía de la familia y, en especial de tu nieto Mateo.
    No sólo eso. Veo también que has enriquecido la experiencia con tus agudas observaciones del entorno y de la fauna establecida por allí.
    Como siempre, con tu particular estilo adornas de maravilla los buenos momentos disfrutados en Búbal, Tena y Formigal.
    Me alegro que lo hayáis pasado tan bien.
    En estos días de calor se agradece el fresquito de Los Pirineos.
    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Es una forma de romper la monotonía y el calor de la ciudad en buena compañía.
    Saludos, José Luis.

    ResponderEliminar