martes, 27 de diciembre de 2022

LA ORQUESTA DE LA VIDA


       Les musiciens de la orquesta observaban con atención el baile de la batuta del director. Su vuelo suave y cadencioso de ida y vuelta, buscaba emocionar al espectador con la armonía de las notas. Las cuerdas, los vientos y el tambor, tocaban la misma canción con aprecio y sentimiento, mientras la música llegaba a las bóvedas de lo celestial porque las lágrimas aparecían  entre la gente del gallinero. 

     .... Tenemos necesidad de ternura .... 

     Pongamos que el equilibrio, la proporción, el entendimiento demostrado por la filarmónica, sean una nueva puesta de sol para este año que vamos a comenzar. Pongamos que los cauces de la desventura se obstruyan y lleguemos al vergel de los limos donde abunda la serenidad y la armonía de espíritu,.. ¡ uf ! qué gran logro sería !, podríamos entre todos hacer grandes cosas para estar en la Era de Octavio Augusto.

     .... los chicos del flautín también tienen esperanza ....

     Después de unos años complicados creo que los ciudadanos nos merecemos un poco de sosiego. No se me caen prendas para reconocer que el ejecutivo, plagado de gente joven y culta, está capeando con nota la gestión de tanta desventura, consiguiendo, además, el aplauso de la comunidad internacional por su buena gestión. Ninguna ayuda ha recibido de la oposición, pues cuando estaban centrados en conseguir logros para la ciudadanía, ellos desmentían cualquier avance social para confundir al gentil.

     Hace unos días presentaba Sergio C. Fanjul en el diario el País, un estudio sobre la Polarización, un mal existente en la sociedad moderna. Comentaba puntual, que la polarización es como las drogas, engancha. El asalto al Capitolio,... impedir que un ponente hable en la universidad, o faltar el respeto a una ministra en el hemiciclo está a la orden del día. Comentaba que se han encontrado efectos en el cerebro igual que en las drogas, al hablar de inmigración, del feminismo, del cambio climático, del aborto.... cada vez hay más adictos a la polarización, los neurólogos lo confirman con estudios recientes. 

     Le da mucha importancia a la polarización afectiva, ideológica, que es la que más enfanga la convivencia. El sentido de pertenencia a un partido se hace peligroso en la polarización, cuando no se da el brazo a torcer. Aquí no vale la palabra.

      Para resumir, y ya acabo, comentaba que el mundo conservador, no está por la labor de construir la Democracia, más bien para destruirla. En cambio el pensamiento de izquierdas tiene claro que su labor es conseguir mejoras para la ciudadanía. El estudio es muy profundo e interesante.

      Como vemos, complicado es poner esta orquesta social en armonía,... pero hay que luchar, hacer pedagogía,... no queda otro remedio, porque vivir indignados todos los días del año, es complicado de llevar. La salud se resiente y nos merecemos otro escenario más justo.

      Estos son mis deseos para el año que viene.

      ¡¡¡ QUE  EL  AÑO  2023   NOS   SEA   TRANQUILO   Y   SIN   PESAR  !!! 

       Chavierín.

2 comentarios:

  1. Pues poco más que añadir porque todo lo que relatas es justo, cabal y coherente.
    Las cosas hay que soñarlas primero para que luego se puedan llevar a la práctica.
    ¿Tanto costaría hacer oposición de forma sosegada y con educación?
    ¿Cuándo se darán cuenta que se educa más con el ejemplo que con las palabras?
    Los ciudadanos tenemos que evidenciar que no nos gusta esa manera abrupta y displicente de oponerse al partido en el gobierno. Y tenemos que difundirlo a los cuatro vientos
    Tu, Javier ya estás contribuyendo a esta tarea con tus ponderados escritos.
    Yo lo anoto en el "debe" y trataré de materializar alguna iniciativa en el 2023.
    En todo caso -y en la línea que ambos mantenemos- me uno a la corriente afectiva y emocional para desear:

    ¡QUE EL AÑO 2.023 NOS TRAIGA LOS PRECIADOS REGALOS DE RESPETO, DEBATE EDUCADO Y CONSENSO!

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  2. Asi va a ser, José Luis, será el año donde triunfe la racionalidad.
    Un abrazo de Javier.

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