miércoles, 17 de abril de 2013

TRAZOS DEL HUMANISMO

Hoy voy a escribir acompañado de aires de la Toscana,... aires insuflados por unos egregios señores, intelectuales y rebeldes contra las normas y costumbres viciadas, con el amigo Dante Alighieri, el de la Divina Comedia, el padoves Petrarca y con el ínclito Boccaccio. 
Rebeldes con causa, que agobiados por el excesivo protagonismo de la iglesia en la época medieval, causante del debilitamiento del conocimiento puro y su cerrazón con los temas teológicos, decidieron fundar la conciencia humanista basada en la formación íntegra del hombre, empleando para ello, las fuentes grecolatinas y la lengua de los escritos clásicos, como la gramática, la literatura, la historia, la filosofía moral,... ciencias ligadas también con el diálogo,... la razón y la conducta de las personas. 

Así es como esa vida de santurrones y dominio eclesial, dio paso al estudio de la mitología clásica, al pluralismo y al estudio de los restos arqueológicos, porque según ellos, estas aptitudes definen mejor lo que ha sido la conducta humana sin trampas ni cartón.

Trescientos o cuatrocientos años fundamentando el humanismo en Europa, influencia fuerte en los países nórdicos y continuos conflictos con la iglesia por su forma de pensar.

Se esmeraban en buscar con rigor la verdad escarbando en los escritos, forjados con las reflexiones de los autores clásicos y transmitidos en los anales y bibliotecas monásticas de toda Europa.

También podría invitar a este movimiento a Tomás Moro o a Luis Vives, humanistas de pro, y también trasteadores e inventores de la imprenta en aquellos años, lo que permitió transmitir más información e intercambio de puntos de vista para fomentar el debate.

Hoy en día, no nos pasa desapercibido este antiguo movimiento contrario a la opresión y a la imposición. De esos tiempos nos viene esta visión de las cosas que sirven para examinar de forma correcta los aferes obscuros y denunciar lo que no está bien.
Fuertes conflictos han surgido durante años en el panorama mundial, llantos y lágrimas han sido los testigos, y al final, después de la masacre, queda como solución, el diálogo y la reflexión para cerrar las heridas.

Nadie es dueño de nadie y todos somos parte del lugar donde nos movemos,... donde podemos opinar y contribuir a cambiar un poco las cosas con buenas palabras, porque el destino final es el sentido común.
Estos grandes pensadores, se movían en sus círculos empleando el criterio,... hoy nos llegan los problemas y los puntos de vista por muchos caminos y sólo se trataría de hablar para expresar una opinión.

Los grandes movimientos actuales, como el 15-M, las plataformas ciudadanas, los desencantados de los gobernantes, etc. etc... no han hecho más que exponer sus quejas porque la Democracia no cumple con su finalidad.

Trazos buenos de conducta nos vendían estos señores.

Con respeto,...

Chavierín.

1 comentario:

  1. Humanismo, cultura clásica y.... sentido común. Es un menú que le sentaría muy, pero que muy bien a más de uno de nuestros ínclitos próceres. Como no andan muy sobrados de ello, no es de extrañar, como tú dices, Javier, que las distintas mareas que periódicamente se manifiestan, señalen con insistencia la necesidad de mantener los avances sociales que tan trabajosamente hemos conseguido y que, ahora, tan sigilosa y subrepticiamente nos quieren arrebatar. Un abrazo. José Luis

    ResponderEliminar