El estruendo y el pregón eran mis compañeros, mientras sus habitantes de cartón, de moricos del Pilar con su boca abierta, acompañaban al toro de fuego que estaba presto a salir,... rueda que rueda la traca, el bayón y los vinagrillos del club ".
Hazañas del guerrero rural que asiente e insiste en los orígenes de su pila bautismal.
Y allí querría llegar yo, a un lugar parecido,... por el Ebro, guardando silencio para no molestar a la Dueña de la emoción y, de paso, acercarme en silencio con mi blog de opinión de ciudadano de a pie, al ayuntamiento de la plaza,... como goyesco y con cédula de libertad, para decirles, que aunque creen que nadie les ve les observamos.
Loa gestores abundantes que completan el personal de la casa del lugar, políticos y empleados, en estos tiempos de crisis no lo están pasando del todo mal, son unos afortunados dentro de la anormalidad que abunda en la ciudad. Su sueño, presiento, será tranquilo y sin alarmas, porque los presupuestos van viento en popa, sin problemas, ya que si no llega el dinero, con aumentar los impuestos, la tranquilidad de la siesta se alargará hasta altas horas de la tarde,... la placidez manda....
Con su parné asegurado hablan y da la sensación de que entre los pagos del I.B.I, los recibos del agua y etc. etc. etc., que ellos creen los correctos, los ciudadanos nos tenemos que someter a sus decisiones, cuando un buen político tiene que intentar, por todos los medios, que los ciudadanos paguen lo menos posible
Y con la reflexión comienzo,... el ciudadano no puede ser el pagano de lo que decidan los partidos. En una comunidad de vecinos mandan los inquilinos y no el gestor, y en el caso que nos ocupa lo mismo, y si no hay dinero suficiente tendremos que reducir el staff, el personal,... a todos nos gustaría encontrar refugio en ese lugar,... ¡ faltaría más !.
En tiempos de crisis de necesidad hay que hilar muy fino para mantener el espíritu democrático. Los que organizan el cotarro, y viven del cotarro, lo primero que hacen es asegurarse los gastos de personal y, si no hay dinero para otros menesteres, se mira para otro lado y punto.
El ayuntamiento no puede ser un centro blindado de libre albedrío, su gasto es administrativo y de control de gastos,... y con luz,... con mucha luz.
En tiempos de crisis la solidaridad,... la justa, las prebendas del staff,... las justas y la seriedad y sentido común muy abundante, porque todavía me sigo preguntando qué tendría aquella mesa para valer 180.000 euros o porqué no se hizo el campo de la Romareda, o quienes son los dueños de los terrenos de Valdespartera y,... ¿ los de San José ?.
Chandríos aylos,... malos concejales y amigos de viaje,... de los de las velas del altar,... " sacristán que vende cera y no tiene colmenar, rapadeum, rapadeum de las velas del altar ".
La ciudadanía es sagrada, es la que manda, y la empleaduría del ayuntamiento a obedecer, con buenos modales y respeto al ciudadano.
El ciudadano guarda silencio, pero siente y observa,
Con respeto.
Chavierín.
Hazañas del guerrero rural que asiente e insiste en los orígenes de su pila bautismal.
Y allí querría llegar yo, a un lugar parecido,... por el Ebro, guardando silencio para no molestar a la Dueña de la emoción y, de paso, acercarme en silencio con mi blog de opinión de ciudadano de a pie, al ayuntamiento de la plaza,... como goyesco y con cédula de libertad, para decirles, que aunque creen que nadie les ve les observamos.
Loa gestores abundantes que completan el personal de la casa del lugar, políticos y empleados, en estos tiempos de crisis no lo están pasando del todo mal, son unos afortunados dentro de la anormalidad que abunda en la ciudad. Su sueño, presiento, será tranquilo y sin alarmas, porque los presupuestos van viento en popa, sin problemas, ya que si no llega el dinero, con aumentar los impuestos, la tranquilidad de la siesta se alargará hasta altas horas de la tarde,... la placidez manda....
Con su parné asegurado hablan y da la sensación de que entre los pagos del I.B.I, los recibos del agua y etc. etc. etc., que ellos creen los correctos, los ciudadanos nos tenemos que someter a sus decisiones, cuando un buen político tiene que intentar, por todos los medios, que los ciudadanos paguen lo menos posible
Y con la reflexión comienzo,... el ciudadano no puede ser el pagano de lo que decidan los partidos. En una comunidad de vecinos mandan los inquilinos y no el gestor, y en el caso que nos ocupa lo mismo, y si no hay dinero suficiente tendremos que reducir el staff, el personal,... a todos nos gustaría encontrar refugio en ese lugar,... ¡ faltaría más !.
En tiempos de crisis de necesidad hay que hilar muy fino para mantener el espíritu democrático. Los que organizan el cotarro, y viven del cotarro, lo primero que hacen es asegurarse los gastos de personal y, si no hay dinero para otros menesteres, se mira para otro lado y punto.
El ayuntamiento no puede ser un centro blindado de libre albedrío, su gasto es administrativo y de control de gastos,... y con luz,... con mucha luz.
En tiempos de crisis la solidaridad,... la justa, las prebendas del staff,... las justas y la seriedad y sentido común muy abundante, porque todavía me sigo preguntando qué tendría aquella mesa para valer 180.000 euros o porqué no se hizo el campo de la Romareda, o quienes son los dueños de los terrenos de Valdespartera y,... ¿ los de San José ?.
Chandríos aylos,... malos concejales y amigos de viaje,... de los de las velas del altar,... " sacristán que vende cera y no tiene colmenar, rapadeum, rapadeum de las velas del altar ".
La ciudadanía es sagrada, es la que manda, y la empleaduría del ayuntamiento a obedecer, con buenos modales y respeto al ciudadano.
El ciudadano guarda silencio, pero siente y observa,
Con respeto.
Chavierín.
El Ebro guarda silencio -ahora- pero en cualquier momento puede mostrar la furia de sus aguas turbulentas. Basta que se den las circunstancias apropiadas para que la riada anegue a su paso todo lo que encuentre. Y el símil es perfectamente aplicable a lo que sucede en la sociedad actual. Tan grande es el hartazgo popular, tan denostadas están las formas y maneras de actuar de políticos, banqueros y presidentes de confederaciones de empresarios, que -creo yo- sería suficiente con una tormenta de medio pelo para que las aguas enfurecidas de la ciudadanía arrasen con lo que se topen.
ResponderEliminarUn abrazo, Javier.
José Luis