EL SUEÑO DE VAN GOGH

Porque me lo sugiere la imagen y estas fechas, voy a escribir con tranquilidad del sosiego,... del amor,... del rostro,... de las emociones, de los desencantos que nos depara la vida, de esos padres que te daban besos y caricias y que hoy ya no están.

" Curva tras curva, el retorno del cabañal, de la rabosera; con la cabeza baja y con delicadeza, breve mirada al cementerio,... desde el Loreto, porque allí estaba su amor, su compañera, que se marchó muy pronto dejándole sumido en la tristeza ". 

Los sueños,... el caminar, el ir avanzando día a día entre ausencias y soledades,... ¡Muy duro!, hasta que la mente asume la realidad de la existencia; se fue la persona que lo llenaba todo,... en aquellos años de comienzo de nuevas ilusiones. Todo se quedó en el camino,... las alegrías,... el sillón de mimbre,... los arrumacos,... lo que se mantenía en la gloria familiar, como creíamos que nos pertenecía y, al final,  todos juntos para salir adelante y asimilar la desazón que deja la vida y huir de la desesperanza,... pero menos mal que descubrimos, que las tristezas, también tienen fecha de caducidad.
Y si quieres construir para avanzar y reír, voy a ver si encuentro esa chaqueta gris perseguida y mimada que vivía en las entrañas del obrador y que tuvo santo y patrón de defensa  para abrigar al labrador,... sonrisas e intentos vanos de tirarla a la basura.

Y la vida continuó en ese domus, viendo pasar las primaveras y los inviernos con la llegada de fuertes lazos de amor alrededor del labrador, porque se lo merecía y porque era el encargo que la naturaleza nos dejó,... nunca estarás solo.

Hasta que pasaron los años y su compañera lo reclamó para hacerle compañía,... al atardecer,... en silencio,... con mucha placidez, como dibuja la escena de Van Gogh,... en esos campos de trigo donde siempre fue feliz.
Y los que nos quedamos, a seguir viviendo y a colocar de vez en cuando ramicos de espliego en sus fotografías y a llorar su ausencia,...  cuando nadie nos ve. 

¿ Porqué los tengo tan presentes ?,... porque enriquecieron mi existencia, porque con ellos descubrí que la vida está hecha de ternura y porque me enseñaron a apreciar el amor en la familia,... por eso.

Nunca los olvidaremos.

Chavierín.