sábado, 31 de marzo de 2018

LA CUPULA

                    Para llegar al cielo de la sapiencia, muchas veces ocurre, que en placentero de primera plana de periódico, aparece  la disertación "magnífica " de algún político de turno. 
     La noticia se sirve en bandeja de plata y, descubres, que esa reflexión, más de una vez, la hemos hecho los ciudadanos de a pié. Frases de conferencia, vendidas a buen precio, pero que no son ninguna novedad.
     La cúpula, la bóveda del pensamiento, donde los tribunos tienen que demostrar de vez en cuando, que si ahí están, es para más que para ganarse el sueldo. 
     Y tan panchos se quedan con semejante " alocución ", que se van a tomar el vermut de las 12,  sin problema alguno.

     ..... leyendo en un carasol....

    Hace unos días, Felipe González, en la presentación de un libro, comentaba que los jueces tenían el control del país  porque los políticos no habían sido capaces de dialogar, para solucionar el problema catalán.

     ..... ¡ nada nuevo nos trae el semanero, sra. Victoria !.....

     Los desastres del pensador intelectual, la entelequia, la voz de la conciencia que les hace tornar al pasado para reconocer que casi nada hicieron bien, que dejaron pasar los años entre engaños y fraudes disimulados, dándole más importancia al partido, entre conveniencias y escándalos, que al haber actuado como manda la bondad de la política.
     Miras para arriba, para la cúpula, y ves los abusos cometidos en estos tiempos pasados, y sale la realidad del descubrimiento, después de las disertaciones que hicieron en los grandes foros de aclamación como divos, hoy, visto lo visto, se demuestra, que todo eran palabras vacías.

    Hoy, llegan y esperan el aplauso de la gente,.... pero nadie asiente,.... se quedan solos,.... lo que dicen en tribuna grande, la gente de la calle, ya lo conoce,.... están cansados,.... les lleva la delantera porque no es ninguna novedad,.... sus actuaciones en entredicho te obligan a espabilar y a sacar conclusiones.

     El apuro de la nación, cuando más se necesita arreglar las cosas, más se sufren las secuelas de esa pésima forma de actuar.

     Ellos mismos se van descubriendo.

     Chavierín 

     

1 comentario:

  1. ¡Cuánta obviedad hemos tenido que soportar los pacientes ciudadanos! ¡Cuánta mixtificación lingüística en las alocuciones de políticos de renombre que dan vueltas y más vueltas pero no acaban de concretar sus verdaderas intenciones! Las expresiones grandilocuentes pronunciadas -sin convicción- en la cúpula ya no nos sirven. Como tú dices, tendremos que sacar nuestras propias conclusiones.
    ¡Vaya bien, Sr. cronista!
    José Luis

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