LAS TRECE ROSAS,.... by Chavierín

          De vez en cuando, para dar romanza, sería conveniente, por festiva evocación, tocar la lira de Fideo de Mileto y recitar poesías en los lugares que son de ensueño y tranquilidad, como ese vergel de encuentros en medio de la ville de Saragosse, el Parque Grande, con sus fuentes versallescas y sus bancos románticos de rosaleda, escondidos entre estanques y bustos de poetas. 
     La preciosidad de ingenio expone en ese rincón, árboles y arbustos traídos de todos los lugares del mundo, dibujando, "des beaux jardins ", en el paseo de San Sebastián, de la época de la sombrilla y el glamour, como mostraban las grandes damas de otrora, que tuvieron a bien, disfrutar de tan bucólico rincón.

     ..... ¡ Merceditas, cuando vengas del parque, tráele a Don Anselmo unos crespillos, que le gustan mucho ! ..... freidurías de entonces....

     Y sí la armonía y la experiencia abundan en ese lugar, bien cierto es, que la pleitesía no se hace esperar y todos se apresuran a visitar y a saborear ese alimentario de la vista, a recibir aires y aromas del floristeo, y a leer cartulinas de arbustos en su peculiar jardín botánico.

                          " Mientras el mundo aliente,... mientras la esfera gire,... mientras la onda cordial aliente un sueño,... mientras haya una viva pasión,... un noble empeño,.... "   Rubén Darío...., un poeta en ese lugar de los recuerdos....

     ..... bellos senderos.... 

      Donde se identifican los habitantes de la ville con su parque de ensueño, el mayor, el de la experiencia, que viene de las costumbres de infancia y juventud, desde cuando descubriste de infanzón, ese inmenso guerrero en las alturas, como dueño y señor de nuestra historia,... desde cuando ibas de joven con los amigos y amigas a pasear y a tomarte un refrigerio y a hablar de cosas de la edad,... "como cuando los potrillos desbocados buscaban entereza ",... Los tranquilos paseos y la ornamentación yacían en la placidez, in órdine, para la observancia y el espíritu reposado.
     Y retornas después con tu familia, como la llamada de pertenencia, con tu mujer y tu hijo,... y el triciclo,.... y el Heraldo de Aragón, para volver a observar y a respirar esa tranquilidad que te atrae, porque tu también eres parte de ese escenario,... la ville donde vives....

    Mi grata evocación y reconocimiento.

    ..... hace unos días, en la última visita....

    Y como tenemos un precioso rincón lleno de sentimientos no podía faltar en él, el homenaje  de la ciudad de Zaragoza a esas jovencicas que murieron por sus ideas en Madrid, las Trece Rosas,... aquí tienen su glorieta,.... por los tiempos estarán entre nosotros,... entre flores y tristezas.

    Los brazos de acogida de este parque siempre han sido inmensos.

    Gran detalle del señor alcalde.

     Chavierín.