ACTITUDES INDESEABLES

          La luna y el astracán se mezclaban esa mañana en la radio del conductor del autobús, el indomable locutor conservador de los montes de Teruel entrevistaba al alumno aventajado del Partido Popular y los insultos. En corro, las manos de lomera atusaban al egregio político de la escasez y te ponían las gallinas en la piel con sus puntos de vista de los años rancios de peligros,... no veían bien al apuntador del presidente en Las Ramblas y por eso llamaban a las plazas a sus niños de la revolución para apartarlo de palacio.

     .... con cierta incomodidad....

     " Cuando a un señor intolerante se le da el poder de un micrófono la sociedad lo sufre aunque sea de soslayo "

     ..... y ya en el andén....

     Y es de entender que el señor Sánchez busque entresijos y oportunidad para solucionar el problema catalán, aunque le digan,... ¡ ni un paso más !,... ¡ hasta aquí hemos llegado !,... y después,... a echarnos las manos a la cabeza,...
     .... " desde la palabra y la paciencia no tienen sitio los cañoneros ",... y mientras,...

     Te agarras a las asas de tus convencimientos y ves que estos grupos políticos no fueron trigo limpio con las arcas del estado y que continúan hostigando a la ciudadanía. No se portan bien los salvadores de la Patria. 
El mundo ejemplar que quieren dibujar, excluyente, ajeno al criterio, abochorna al gentil y le llena de tristeza,... porque en este país, la guerra del pensamiento y la legitimidad no conoce parangón,... echas en falta el tiempo perdido en las aulas de la corrección. El miedo al dolor sobrevive en este territorio por ciertos rescoldos que no se apagaron bien cuando se emplean formas e insultos en las plazas de la oportunidad.

     .... al cierre de la redacción....

     Dicen los grandes divos de la prensa, que esta manifestación fue política y nada social, que la gente no acudió como esperaban, y que dónde hay que hacer política es en el parlamento y no en la calle,... ¡otra cosica es!,...

     Nos gusta vivir en las buenas costumbres y dejarnos de confrontaciones,... cansados ya....

     Chavierín.