lunes, 16 de octubre de 2023

EL HUERTO DE LOS OLIVOS


         Pues sí, de ese lugar salían las palomas portando en el pico ramas de olivo. 

Revoloteando iban por el mundo representando a esa paz deseada por los pueblos, agobiados porque las guerras los habían dejado extenuados,... hasta el escudo de Israel porta unas ramas de olivo rodeando el candelabro o menorá, para repartir bendiciones,... ¡ señor, señor !,... ¿ a dónde han llegado ?. 

     Entre el deseo y la realidad, reflejado en su escudo, ha habido una metamorfosis. Como decía Kafka, el hombre se ha deshumanizado y se ha convertido en una especie rara que abandona los principios.

      El pueblo de Israel, un pueblo perseguido, sin patria, pero muy culto, nunca fue aceptado en los países, porque tenían una forma de ser demasiado particular, estaban inmersos en su religión y sus costumbres, dando la sensación de que ellos eran especiales.

    .... un pequeño ensayo de pensamiento ....

    La atención especial con ellos por parte de la gente fue a partir de la persecución intolerable que sufrieron en los campos de concentración en la Segunda Guerra Mundial. A raíz de esos terribles acontecimientos se planteó la idea de buscarles un lugar para existir como nación como gratitud a sus sufrimientos. El lugar elegido fue Palestina por la pertenencia y origen de sus credos. 

     Nada se puede decir de esta decisión, en parte lógica, aunque sabían que habían roto la tranquilidad de sus habitantes originarios.

    .... el pecado .... 

Con poderío, con poco miramiento, y con apoyos de las potencias, se hicieron dueños de casi todas sus tierras relegando a sus habitantes a ser simples espectadores. La guerra a lo largo de los años había creado un estado que solo veía lo que le interesaba, se había vuelto soberbio y despreciable con la gente palestina,... el apartheid creado con mucho control en estos últimos años por el gobierno ultraconservador de Netanyaju, no ha hecho más que mostrar una realidad, una forma de actuar que se extiende por el mundo.

     Sin ir más lejos, en España vemos cómo los gobiernos conservadores de las autonomías son grandes constructores de guetos, desprecian al débil y lo mancillan. Lo quieren destruir y quitarles su calidad de vida,... su Sanidad Pública,... su educación pública,... le dan ayudas al que menos lo necesita,... todo son prohibiciones. Al lado de mi casa está el colegio de los Maristas,... de lujo,... moderno, con polideportivo de maderas nobles, que recibirá del ayuntamiento más ayudas aunque no las necesite, y en cambio, para el colegio público Cortes de Aragón, sencillo y decente que está a su lado, no le dan ni un euro,... no se entiende. Así surgen las rebeldías,... cuando la gente ve que apoyan a los ricos por soberbia y dejan de lado a los débiles. Así nacen los guetos y los problemas de convivencia,... después de lo visto en Israel, no es bueno insistir en esta forma de hacer política.

     Por estos abusos y opresión como principio, ocurren los hechos tan lamentables como lo de estos días en Israel. Alguien de su casa, Isaac Rabín, premio Nobel de la Paz les dijo que este no era el camino para solucionar el problema Palestino y no lo quisieron escuchar.

     Uno no entiende cómo personas tan cultas, no fueron justas y comprensivas con el pueblo palestino con el reparto de las tierras que iban a ocupar. Los que les ultrajaron en la Segunda Guerra Mundial, tenían la misma forma de pensar que ellos están poniendo en práctica ahora. Una eterna contradicción, una metamorfosis, que no entienden las personas que les gusta ir por la vida analizando las cosas. 

    El terrorismo es imperdonable. Lo que hicieron los de Hamas desgarra los ánimos, no tiene ninguna justificación. 

    Todo lo ocurrido nace de la opresión,... de la imposición, caminos que siempre acaban mal. El que ha tenido oportunidad y formación, tiene que adelantarse a los acontecimientos, ser ejemplar e intentar comprender. No son conscientes, ni Netanyahu, ni los de Hamas de los sufrimientos que están causando a sus ciudadanos por su obcecación política,... y ahora vemos los lamentos.

     El mundo conservador apoya a Israel sin mirar más allá, el mundo demócrata de izquierdas reconoce que lo que ha hecho Hamás no se puede permitir, pero profundiza en los motivos que nos ha llevado a esto para llegar a una solución.

     Desgraciadamente el horror siempre nos hace reaccionar.

      Con respeto...

     Chavierín.

     

3 comentarios:

  1. Vaya por delante que me considero una persona agnóstica: No sé si es verdad que la religión sea el opio del pueblo, lo que si me parece cierto es que la religión pretende enseñarnos más de lo que puede enseñarse razonablemente, que Dios existe, que el alma es inmortal, que hay una vida eterna después de la muerte, todo eso me parece indemostrable...
    En cuanto a Benjamín Netanyahu, es un populista que representa una democracia y se comporta como un "genocida"...
    El pueblo dé Palestina, me recuerda esa famosa metáfora: en el que un avispado alimenta tiburones para para atracción de feria, cuando se termina esos tiburones se mueren de hambre porque se les ha olvidado cazar para poder alimentarse...
    La resignación no es una virtud religiosa. y no es una virtud judía tampoco. aceptar la voluntad de un Dios, no es dejarte aplastar por ese Dios, es enfrentarte a Dios...
    Política y economía deben ir unidos y los palestinos deben luchar por un Estado que haga progresar a su pueblo...

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  2. Conozco bien las interioridades del colegio Cortes de Aragón y la dedicación y el tesón con el que los equipos directivos y el profesorado se han dedicado a la educación de sus alumnos.
    Conocí, igualmente, las particularidades de los alumnos y su extracción social.
    De acuerdo totalmente contigo que es una injusticia supina apoyar con dinero de todos al colegio concertado de al lado mientras se racanea con el presupuesto dedicado a la enseñanza pública.
    ¡Enhorabuena por tus objetivos razonamientos sobre lo que está ocurriendo en Israel, Gaza y Cisjordania!
    ¡Fuertes saludos!

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  3. Saludos siempre, José Luís, agradezco tus palabras.

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